Documentación histórica relativa a las inundaciones del País Vasco de agosto de 1983

Este año se han cumplido 40 años del peor evento en la historia del Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) en la cobertura de los riesgos extraordinarios, las inundaciones en el País Vasco en agosto de 1983. Por ello, en este artículo se va a tratar de recopilar y ordenar la información disponible en los archivos y documentos del CCS de aquella época en lo que se refiere a resultados económicos de este evento para dejar constancia de este episodio y que esta información quede disponible. 

Todos los importes se expresan en euros, nominales o actualizados, según se indica. Todos los datos y las tablas y gráficos elaborados con ellos son propios del CCS.

En el Informe Actuarial para la aprobación de la tarifa de riesgos extraordinarios, aprobada por Resolución de 28 de noviembre de 1986 de la Dirección General de Seguros, se recoge la siguiente siniestralidad para el total del año 1983:

Según Informe Actuarial Tarifa RREE 1987

Tabla 1.

Los datos que aparecen en este informe actuarial (marcados en la Tabla 1 con fondo rojo) son el número de expedientes y las indemnizaciones nominales, que expresamos en euros, distribuidos por causa, para todo el año 1983.

Una importante aportación de estos datos es la distribución de la siniestralidad según las causas que el CCS cubrió hasta el 31-12-1986, que incluían lluvia, viento y pedrisco, ya que, estadísticamente, esa información pasó a tratarse a partir de entonces de manera global, junto con el huracán, bajo el epígrafe de tempestad ciclónica atípica. 

El resto de los datos se calculan a partir de los anteriores y son las indemnizaciones expresadas en euros actualizados a 31-12-2022, la distribución porcentual de las indemnizaciones por causa y el coste medio actualizado en euros. 

Cabe destacar que en el año 1983, las causas más relevantes fueron la inundación por desbordamiento y la lluvia, con el 72 % y 26 %, respectivamente, de las indemnizaciones totales.

También cabe destacar lo elevado que es el coste medio en ese año, muy superior a la media de la serie analizada (según la Estadística de Riesgos Extraordinarios disponible en la web del CCS), tal y como se muestra en el gráfico 2 siguiente (con importes actualizados a 31-12-2022):

Gráfico 2.

En el informe actuarial mencionado no hay una referencia expresa al evento del País Vasco de 1983, sino que se trata ese año en su conjunto; en dicho año hubo otro evento de especial relevancia que fueron las inundaciones en Cataluña y Comunidad Valenciana del mes de noviembre, cuyo coste rondó el 6,5 % del evento de agosto pero, no por ello, deja de ser un evento reseñable.
 
Sin embargo, lo que queda claro es que el evento de agosto en el País Vasco es el que marcó la siniestralidad del año, ya que éste representa el 88 % del total.

Un año y medio después, en el Informe Actuarial para la aprobación de la tarifa de riesgos extraordinarios, aprobada por Resolución de 20 de mayo de 1988 de la Dirección General de Seguros, se vuelve a recoger la siguiente siniestralidad para el total del año 1983:

Según Informe Actuarial Tarifa RREE 1988

Tabla 2.

En esta ocasión, solo se incluyen las indemnizaciones nominales totales (fondo rojo) que han pasado de 224 millones de euros a 251 millones de euros, esto pone de manifiesto una siniestralidad un 12 % superior a la recogida con anterioridad.

Bajo las hipótesis siguientes: (i) que se mantienen los porcentajes de siniestralidad (indemnizaciones) por causa, que en este informe actuarial no se recogen, y (ii) que se mantiene el coste medio por causa, se cumplimenta el resto de la información.

Todo hace pensar que los acontecimientos de 1983, posteriores a una significativa siniestralidad en 1982, entre otras, por una inundación muy relevante en octubre en la Comunidad Valenciana (con un coste del 26,9 % del evento del País Vasco de 1983), propiciaron: (i) una nueva delimitación de los riesgos cubiertos, según el Real Decreto 2022/1986, que aprueba el Reglamento de riesgos extraordinarios, así como (ii) un análisis del posible reaseguro de esta actividad; es decir, ante esta situación tan adversa, el CCS profundizó en el estudio de la prevención de los riesgos y de medidas encaminadas a la reducción de los mismos.

En el gráfico 3 se muestra la siniestralidad (con importes actualizados a 31-12-2022) en la serie de los últimos 50 años, donde se pone de relevancia, en términos relativos, la importancia de la siniestralidad de los años 1982 y, sobre todo, 1983, frente a siniestralidades más actuales como la tempestad Klaus en 2009, el terremoto de Lorca de 2011 y las inundaciones de sureste peninsular en 2019, y esto ocurre pese al incremento en el nivel de aseguramiento en España durante la serie analizada.

Gráfico 3.

En el gráfico 4 se muestra cómo los capitales asegurados han pasado de 1,6 billones de euros en 1990 (no se dispone de información previa a este año) a 6,5 billones de euros en 2022, con importes actualizados:

Gráfico 4.

En este contexto, en los años previos a 1990 se llevó a cabo un estudio de un posible reaseguro de riesgos extraordinarios, en el que el CCS sería la entidad cedente de los riesgos y los reaseguradores entidades del mercado nacional e internacional; finalmente este reaseguro no se contrató por lo que se detalla más adelante.

El informe del CCS, donde define su objetivo de reaseguro, indica lo siguiente:

El bróker de reaseguro con el que el CCS estuvo trabajando emitió un informe, fechado el 23-01-1990, en el que, con el consenso del mercado internacional del reaseguro en cuanto a las expectativas de la capacidad mundial del mercado, se recogía que el objetivo del reaseguro sería, básicamente, cubrir los acontecimientos de 1983 en Bilbao, con un coste de 203 millones de euros de 1983 (solo para inundación), puesto que desde enero de 1987 ya no se cubrían los daños por lluvia. 

Por primera vez se encuentra, en los informes propios del área técnica, una valoración del evento de agosto de 1983 en el País Vasco, aunque sea solo para inundación; si bien, con el transcurso de los años, se fue concretando este importe hasta cerrar el evento en la cuantía que se recoge en el apartado «Información contenida en la Estadística de Riesgos Extraordinarios», que ya incluye inundación y lluvia.

Para poder entender las opciones de reaseguro que se tuvieron en cuenta en 1990, se debe recordar que fueron años con elevada inflación, tal y como se muestra en la Tabla 3:

En millones de euros

Tabla 3.

Otro elemento a tener en cuenta es la extensión geográfica a considerar, ya que el evento afectó también a Navarra y a Cantabria, principalmente a esta última. 

El bróker proponía una cobertura de reaseguro de exceso de pérdida a partir de un deducible de 120 millones de euros por evento, se indicaba que un deducible inferior a 120 millones de euros de 1990 conllevaría una prima inasumible por el CCS.

La cobertura a partir de 120 millones de euros se ofrecía en 4 tramos, cada uno con su tasa de prima, hasta alcanzar 240 millones de euros en exceso del deducible, que incluiría los acontecimientos de Bilbao de 1983 con un margen adicional.

El bróker incluye en el informe, como elemento relevante, la necesaria limitación temporal de un evento, proponiendo un máximo de 168 horas (7 días) y, consiguientemente, la posibilidad de reponer cobertura si se sobrepasaba la limitación temporal en un solo evento.

Otros brókeres y entidades reaseguradoras aportaron también propuestas en términos similares, que fueron actualizadas en los años siguientes, sin que se llegara a contratar el reaseguro en ningún momento por el motivo que se detalla más adelante.

El planteamiento del reaseguro debe entenderse dentro de la situación de la entonces denominada  «Provisión para desviación de la siniestralidad» en riesgos a las cosas, riesgos personales y responsabilidad civil del conductor que, a 31-12-1990, tenía un saldo de 82 millones de euros.

El primero de los estudios es del año 1989; existen estudios posteriores pero no aportan información adicional sobre el evento que nos ocupa.

Bajo el título «Estudio sobre la cobertura de riesgos extraordinarios-1989» se recoge información que a estos efectos es muy relevante, como:

• Se identifican las siniestralidades más significativas atendidas por el CCS en los años (1957-1987), donde bajo el epígrafe «Norte – Inundación y Lluvia – 1983» se imputa a este evento unas indemnizaciones de 268 millones de euros de 1983:

Tabla 5.

Tabla 6.

Los datos finales del evento del País Vasco en agosto de 1983, una vez que fueron tramitados y abonados todos los expedientes de siniestro, se muestran en las tablas de este apartado.

Debe tenerse en cuenta que se muestran las indemnizaciones, primero, por el importe nominal, euros del año del siniestro, y, a continuación, en euros actualizados a 31-12-2022 con los correspondientes IPC de la serie. No se tienen en cuenta otras variables como: (i) incremento en el nivel de aseguramiento, (ii) la incorporación de la cobertura de pérdidas pecuniarias, (iii) la mejora en los mecanismos de reducción del daño o (iv) la eliminación de la cobertura de lluvia.

Se refiere a indemnización de daños materiales, no se dispone de información relativa a la posible cobertura de daños personales.

Tabla 7.

El evento, como se ha mencionado anteriormente, afectó principalmente al País Vasco, en concreto a Vizcaya, pero también a Cantabria y, en menor medida, a Navarra.

Tabla 8.

A estos efectos se han mantenido las proporciones de expedientes e indemnizaciones por causa de la Tabla 1, que está referida a todo el año 1983, ya que no se tiene el detalle para este evento concreto.

Tabla 9.